Hay que recordar que Google es miembro de la coalición "BetterAds" (BetterAds.org), un proyecto orientado a mejorar la experiencia de los usuarios en Internet, y que ha definido unos estándares de calidad en los anuncios para evitar la publicidad molesta o intrusiva para los internautas. Basándose en esto, la nueva actualización de Google Chrome 64, ha incorporado en el navegador un bloqueador de publicidad para filtrar este tipo de anuncios intrusivos de forma que no se muestren al usuario.El movimiento de Google ha levantado rápidamente las críticas del resto de Empresas de monetización Web que no forman parte de la coalición BetterAds. Las conocidas como "Alternativas a Adsense", la competencia de Google en el sector, lo ven como un claro intento de monopolio para imponer el combo de Adsense y Adwords en Internet, la principal fuente de ingresos de Google.
Tampoco han tardado en aparecer iniciativas que abogan por la libertad de los webmasters en decidir la publicidad que quieren utilizar en sus páginas. La que más rápidamente se ha popularizado es la iniciativa "Dontblockmyads", que además de defender la libertad de publicidad en la Red, también ha habilitado una herramienta a los webmasters para saber si su página ha sido incluida en la lista negra de Google Chrome 64.
La opinión del sector
Empresas como Adsterra fueron de las primeras en manifestarse al respecto, y a través de su blog dicen lo siguiente: (Chrome 64 Update - Get Ready with Adsterra!)
Creemos que esta nueva política publicitaria de Google establece un monopolio de la publicidad online. La nueva actualización perjudicará no solo a los editores que están tratando de ganar dinero de manera justa creando un contenido de alta calidad y proporcionándolo a los usuarios de forma gratuita, sino también a los usuarios finales del navegador, que no podrán acceder al contenido que necesitan.
¿Dónde está la libertad de elección? ¿Y el concepto de Internet libre? No podemos encontrar una respuesta a estas preguntas, pero estamos listos para responder a cualquier situación.
Para conocer el tema más en profundidad, hemos hablado con una empresa líder del sector especializada en la publicidad PopUnder (anuncios en ventanas emergentes), probablemente la forma de monetización web directamente más afectada por la actualización de Google Chrome 64. Su CEO ha respondido a todas las preguntas de forma muy clara y directa, aunque ha preferido permanecer en el anonimato.
¿Cuál es tu opinión sobre el bloqueador de anuncios de Google Chrome 64?
Creo que es un ataque a la libertad de Internet. Google ha comenzado a decidir qué tipo de contenido puede obtener beneficios o existir y qué tipo debe desaparecer.
Como seguramente sabes, Google Adsense es parte de la coalición BetterAds, ¿cuál es tu opinión al respecto?
En mi opinión Google no es solo parte de BetterAds. Ellos lo inventaron y lo crearon. Otros miembros de BetterAds existen solo para legitimar las acciones de Google. También sé que ya hay algo de fricción dentro de BetterAds, ya que se dieron cuenta de que Google tomó el control de la coalición BetterAds. Lo que honestamente no es sorprendente, BetterAds creó reglas extremadamente poco claras, Google las interpreta y las impone de la forma que ellos quieren.
¿Cómo definirías la publicidad intrusiva o qué tipo de publicidad podría ser justa en tu opinión para los usuarios de Internet y rentable para las redes publicitarias?
Creo en el capitalismo. Debe haber un equilibrio entre la cantidad de usuarios que se pueden molestarse por los anuncios y la cantidad de usuarios que desean acceder al contenido. Desde el punto de vista técnico, considero un límite: un anuncio no puede causar ningún daño o cambio permanente en el ordenador del visitante y no puede bloquear la navegación. El resto sobre decidir qué está bien y qué está mal debería permanecer en manos de los propietarios del sitio web y de sus visitantes.Si un webmaster deja el sitio web inutilizable debido al uso de demasiados anuncios, los visitantes se irán y encontrarán otro sitio web que proporcione el mismo contenido con menos anuncios molestos. Simple y hermoso: el capitalismo funcionando.
¿Consideras que el bloqueador de anuncios de Google Chrome es un intento de Google para monopolizar el sector del Marketing Digital con Adsense?
Por supuesto. Se trata de obligar a todos a pasar a los formatos donde Google tiene la mayoría del mercado y nadie puede competir con ellos.
Aparte de eso, su objetivo es reducir el uso de AdBlock. La idea es simple, quieren dar a todos los usuarios de Chrome un Adblock integrado (que sorprendentemente no bloquea los anuncios de Google) para que los usuarios no tengan que instalar un bloqueador de anuncios de terceros que bloquee los anuncios de Google.
¿Cuál crees que es el futuro de la industria de la publicidad web?
Honestamente, no se ve muy bien. En este momento puedo ver que Google se está debilitando (no solo con BetterAds o AdBlock, en general) y podría volverse más agresivo para obtener más ganancias. Investigué bastante recientemente sobre Google y ciertamente no son la misma compañía poderosa con mentes brillantes que tenían hace unos años. Desafortunadamente, todavía son muy grandes y tienen una fuerza considerable.
Sin embargo, creo que si la industria de publicidad web sobrevive a este golpe (y estoy bastante seguro de que lo haremos), puede que no sea tan malo.
¿Cómo está afectando a tu empresa la nueva política de Google sobre anuncios aceptables y en qué medida os está afectando el bloqueador de publicidad de Google Chrome?
Hasta ahora no nos está afectando en absoluto. Tenemos nuestras formas de solucionarlo y las compartimos con otras empresas publicitarias de la industria. No soy una persona que renuncia fácilmente, incluso cuando lucha es contra una corporación tan grande como Google. Mientras permanezca en pie, pelearé y ayudaré a la industria y a la libertad de Internet.
El futuro de publicidad web
La publicidad online es un lucrativo sector en constante evolución que mueve en la actualidad miles de millones de dólares al año. Su origen se remonta incluso antes de existir Internet, ya que para encontrar el origen de la publicidad en Internet y el primer ejemplo de marketing digital hay que remontarse a 1978 en ARPANET, la red predecesora de Internet.
La época en la que buena parte de las páginas que podíamos consultar en la Red se hacían de forma altruista, con el único objetivo de compartir contenido con otros usuarios, tocó hace mucho tiempo a su fin. En la actualidad casi todos los creadores de contenido y las páginas web que "alimentan" Internet, esperan obtener algún beneficio económico por su trabajo, o como mínimo ganar lo suficiente para cubrir los costes derivados, como hosting, pagar dominio, etc... La publicidad intrusiva, y especialmente el abuso de muchos sitios web con la publicidad saturando la página de anuncios molestos, parece que ha acabado por colmar la paciencia de muchos usuarios que han visto en los bloqueadores de publicidad como Adblock la solución. Sin embargo, lejos de ser una solución definitiva, solo es un pequeño parche que hace más cómoda la navegación para los internautas para la que la industria del marketing digital ya introdujo su propia "contramedida", la denominada publicidad Anti-Adblock.
En un estudio sobre la publicidad en Internet que realizó el conocido portal HubSpot, la mayoría de usuarios indicaba que considera la publicidad web cada vez más intrusiva, sin embargo también señalaban que estaban de acuerdo con ver publicidad online siempre que no sea intrusiva y más de un 30% valoraba positivamente el hecho de ver publicidad en Internet para ayudar a las páginas web. (Aquí puedes leer el artículo completo: Usuarios de Adblock vs Webmasters: Guerra en la Red por los anuncios aceptables).
Saber cuál será el futuro de la publicidad web es realmente complicado. Además de la ya comentada iniciativa de anuncios aceptables, donde parece que Google lleva la voz cantante, el sector del marketing digital no para de evolucionar y adaptarse a los tiempos, surgiendo constantemente nuevos métodos para que un sitio web genere beneficios. Las cuestiones que se plantean son: cuál es realmente el Internet que queremos en el futuro y cómo conseguir que sea lo suficientemente rentable para los creadores de contenido que a la vez sea una publicidad que los internautas consideren justa.
Una de los métodos típicos que se suele sugerir para que las páginas web generen ingresos, es que quiten toda la publicidad y habiliten donaciones. Por desgracia no parece que sea un método realmente válido y el mejor ejemplo lo encontramos en la Wikipedia, una web sin ánimo de lucro que forma parte de la Fundación Wikimedia y que no usa publicidad para financiarse, solicitando para ello periódicamente donaciones de los usuarios para poder mantenerse, aunque sin obtener demasiado éxito. Si una conocida página como Wikipedia, que está entre las webs con más tráfico de Internet no logra generar ingresos suficientes mediante donaciones, es casi una utopía que el resto de sitios web esperen mantenerse con este método.
También se ha comenzado a popularizar en algunos medios el pago por suscripción, entre ellas el popular "The New York Times", cuyo contenido para los lectores es mediante pago anual, permitiendo únicamente leer unos pocos artículos de forma gratuita. Un método de monetización que puede servir para algunos grandes medios pero que es totalmente inviable para páginas más modestas o blogs.Además, si esto se extendiera a todo Internet, ¿estaríamos dispuestos a pagar por cada página que visitemos? ¿suscribirnos a cada blog o cada web mediante pago para leer el contenido?. Todo sabemos la respuesta.
Otra alternativa en auge que plantean sus propios problemas son los artículos patrocinados. Una forma de generar ingresos que utilizan tanto grandes medios como pequeños blogs, que en realidad no sirve por sí mismo como forma de financiación principal, y habitualmente se utiliza combinándolo con la tradicional publicidad web mediante banners u otro tipo de formatos. Quien haya leído alguna vez un artículo en un medio online que parecía más un publirreportaje que un artículo de información, ya sabe cuál es el motivo (si es que no lo sabía antes claro).
El Bitcoin y las criptodivisas se han popularizado rápidamente en Internet en los últimos tiempos, y también han venido con un método propio para obtener beneficio por parte de los webmasters, el minado de criptomonedas en el navegador. Una forma de generar ingresos que ha levantado muchas críticas, ya que se utiliza mientras el visitante de una web permanece en ella se utiliza parte de la potencia de su procesador para generar ingresos minando alguna moneda digital, con el añadido de que la mayoría de las páginas lo hacen sin avisar previamente a los visitantes de su uso. El futuro de este método tampoco parece muy claro. Además de existir extensiones en los navegadores para evitar estos scripts de minado, antivirus como Avast consideran estos procesos como virus y los bloquean. En realidad parece más bien una lucha contra el Bitcoin y el mundo de las criptomonedas, cuya popularidad no ha gustado a todo el mundo y especialmente a los gigantes tecnológicos como Google o Facebook, quienes ya han anunciando que van a prohibir los anuncios de criptodivisas en sus plataformas. (Bitcoin bust: Facebook and Google are cracking down on cryptocurrency ads)
Si bien el futuro de la publicidad en Internet es bastante incierto, una solución idónea sería encontrar el punto de equilibrio perfecto entre el tipo de anuncios suficientes para generar beneficios y la publicidad no molesta que los usuarios pueden consentir y aceptar, respetando siempre la libertad de elección de ambas partes, tanto del webmaster para insertar la publicidad que quiera en su página, como del usuario para no verse invadido por publicidad.
Nos guste o no, el futuro de Internet está inevitablemente ligado a la publicidad web. Los usuarios deben entender y aceptar que los creadores de contenido esperan obtener beneficio de su trabajo y que sino es así acabarán cerrando, y los webmasters por su parte que no todo vale para generar ingresos con un sitio web. La evolución de la publicidad online durante los próximos meses y años servirá también para definir el futuro de la Red.
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