La larga batalla legal que se lleva librando años en Internet sobre las cookies ha dado un paso más allá, al menos en Alemania, donde el Tribunal Federal de Justicia (BGH) ha dictado en una nueva sentencia que la aceptación de las cookies no debe darse por predeterminada, exigiéndose que los usuarios acepten de forma expresa las cookies publicitarias. La historia en Alemania sobre la aceptación de cookies viene de largo, iniciándose por una demanda presentada por la Federación de Organizaciones de Consumidores Alemanas contra la página de apuestas y juego en línea "Planet49". En esta web, el consentimiento de las cookies por parte del usuario, con el objetivo de evaluar su comportamiento de navegación y así poder mostrar publicidad dirigida, estaba establecida por defecto al entrar a la página, de forma que los usuarios únicamente tenían que aceptarlas para seguir navegando.
El reglamento europeo sobre las cookies, estableció en 2019 que los usuarios tienen que consentir la configuración de cookies que no afectan las funciones básicas de la página, una decisión ratificada ahora por la justicia alemana. La sentencia obliga a determinadas páginas web a mostrar a los usuarios una casilla de verificación específica donde el usuario deberá dar su consentimiento expreso para poder ser rastreado por motivos publicitarios, o para cualquier otro aspecto que no se considere una función básica de la propia web.
En Alemania la sentencia no ha estado exenta de críticas al poco de conocerse, aunque también ha recibido elogios, especialmente desde la Federación Alemana de Consumidores (VZBZ), quienes consideran que es una pequeña victoria para los consumidores y su privacidad, dando a los usuarios de Internet más poder de decisión y transparencia.
Las cookies son en definitiva pequeños archivos de texto que se guardan en el dispositivo del usuario cuando visita un sitio web y permiten que el usuario sea reconocido y recordada su configuración. Su uso es habitual en todo tipo de páginas web, y pueden ser realmente útiles o resultar muy cómodas para los usuarios, guardando el acceso (Login), o por ejemplo en tiendas online, donde sirven para recordar productos que ya se han agregado al carro de compras. Además, casi desde su existencia, las cookies han sido una de las herramientas más importantes para que los anunciantes y las empresas de publicidad web creen perfiles de consumidores y poder orientarlos así posteriormente con una publicidad dirigida, si bien a partir de la introducción del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) en mayo de 2018, las regulaciones de cookies se endurecieron considerablemente, causando una reducción de ingresos por publicidad a muchos sitios web como primera consecuencia.
La sentencia del tribunal de justicia alemán es un episodio más en la larga historia de las cookies y su intento de regulación. Recientemente, Apple anunció que bloquearía todas las cookies de terceros de forma predeterminada en su navegador Safari, mientras que el navegador Chrome de Google también planea desconectar las cookies de terceros en 2022.
En cualquier caso, aún falta ver cómo afectará en realidad a las webs alemanas, y más importante aún, encajar la sentencia y la nueva regulación dentro del Reglamento de privacidad electrónica europeo que está actualmente debatiéndose, o si la medida se extenderá también a otros países de la Unión Europa siguiendo el ejemplo de Alemania.
Aquí puedes leer la sentencia completa (en alemán): Bundesgerichtshof zur Einwilligung in telefonische Werbung und Cookie-Speicherung
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